El mismo procedimiento utilizó Fabra para otra cena particular con la ministra de Sanidad, Ana Mato. En este caso, Fabra, Pastor y el escolta viajaron en AVE desde Valencia el 3 de julio de 2012, mientras al chófer le tocó hacer ese mismo trayecto en el coche oficial, por carretera, otros 700 kilómetros en total. Esta vez el coche oficial recorrió 700 kilómetros para los trayectos entre Atocha, el hotel y el restaurante La Manduca de Azagra, en la calle Sagasta, 14, de Madrid, curiosamente también a pocos metros de la sede del PP, en la calle Génova. Este restaurante tiene unos precios medios de unos 100 euros por comensal. Todas estas facturas obran también en poder de ESTRELLA DIGITAL.
Fuentes del Partido Popular explican a ESTRELLA DIGITAL su extrañeza por el uso de un coche oficial en cenas de carácter privado en Madrid, cuando Fabra tenía a su disposición otras opciones más baratas para el contribuyente, como los coches de servicio del propio PP, del Ministerio de Fomento –con el inconveniente del carácter privado de la cita con la ministra– o incluso el servicio de taxi de Madrid. Además de la anotación explícita en la agenda de Fabra, la presencia de Esther Pastor y la ausencia de responsables de Fomento del Gobierno valenciano marcan un encuentro de carácter específicamente personal.
Esto se traduce en que, anualmente, en la UE unas 2.500 personas podrían salvar su vida y el 15 % de los heridos graves pasarían a tener un pronóstico leve.
La consultora MSI ha recogido una serie de datos para la Federación de Asociaciones de Concesionarios de la Automoción (Faconauto) que aseguran que el valor residual medio (depreciación de un vehículo teniendo en cuenta su edad, número de kilómetros e imagen de marca) de los coches usados que se vendieron hasta febrero se situó en los 5.400 euros.
La cena particular con la ministra Pastor tuvo lugar en el restaurante Bice, en la calle Génova 19 de Madrid, a solo tres portales de la sede central del Partido Popular (Génova, 13). Fabra llegó a Madrid a las siete de la tarde de ese jueves, 19 de abril, y se volvió a Valencia a las 8:40 de la mañana siguiente.
Con el “eCall” se reduce el tiempo de llegada de los sanitarios al lugar del accidente en un 50 % en las áreas interurbanas y en un 40 % en las urbanas, ha estimado la Comisión Europea.