El nuevo teléfono estrella de Samsung, el Galaxy S5 es otra de las grandes novedades. Con un diseño similar al de su antecesor el dispositivo mejora algunas de sus características mediante la incorporación de un sensor de ritmo cardiaco, una cámara principal de 16 megapíxeles -la frontal tiene 2 MP- y capacidad para grabar vídeo en calidad HD.
“Entras en un bucle, en una espiral. Sin saber muy bien por qué, parece que todo el engranaje funciona. Luego sí que hubo un momento en el que decías: ‘a dónde va todo esto’. Yo, francamente, no supe verlo”. Así relata los años de bonanza, especialmente la década de los 2000, un alto directivo de una empresa auxiliar del sector. “Cómo es posible que haya kilómetros y kilómetros de fábricas y polígonos. Me dejé llevar. Creo que todos los hicimos y nos subimos a la ola”.
Hablando entonces de fórmulas y criterios generales, sigo creyendo que el recorte de los gastos públicos innecesarios y la reducción de la presión fiscal (principalmente) a la burguesía que es el motor de la economía patria, son dos ejes portantes de la recuperación, no los únicos, pero sí de entre los más destacables. La reducción ulterior de los sueldos en las franjas más vulnerables, en cambio, no lo es en absoluto.
Francis, un esmaltador de azulejos, también describe el dinamismo del sector antes de la crisis. “Aquí, si querías ganar más dinero te ibas de tu empresa y te ibas a otra sin problema. Pero cuando ha caído, se han quedado las empresas que verdaderamente eran fuertes, y seguirán cayendo”.
“La industria es un gran clúster de la cerámica, pero aquí en España no va como debería. Somos incapaces de unificar criterios, y no nos damos cuenta de que no somos competencia entre nosotros, sino de otros países”, lamenta Vicente Chiva desde MCA-UGT en Castellón. “Las empresas deben ser mucho más grandes para resistir mejor, aumentar la producción, hacer materiales más diversos. Ser más grandes favorecería la internacionalización”.
“En Rusia, por ejemplo, hay mucho nuevo rico. Mucho dinero que ha aparecido y que se empieza a gastar en vacaciones, última moda, etc. Es un mercado donde gana mucho el decorado, las cosas pesadas, el rococó”. Este director comercial insiste en que exportar no es coger un camión y llevarse cuatro cajas de un día para otro. “El proceso empieza realmente hace 20 años cuando se lleva el primer palé a Rusia. Tienes que tener un mercado, haber trabajado y cambiado mucho internamente para que desde España se pueda gestar un proyecto fuera”.