También existen diferencias entorno a la infraestructura de recarga; en Francia no hay muchas estaciones de carga, pero hasta el momento la mayor parte de ellas son gratuitas. Disponen de tres grandes redes: la más grande es propiedad de Renault, Nissan también dispone de una red y Leclerc (cadena francesa de supermercados) ha instalado algunos cargadores en sus estacionamientos.
La moraleja de esta historia es que los políticos pueden hablar y actuar a favor de los coches eléctricos, pero en realidad no controlan el mercado. El coche eléctrico tendrá éxito cuando llegue su tiempo, y serán los conductores los que decidan cuándo será eso.
Un enorme pico en la primavera pasada debido al lanzamiento al mercado del Renault Zoé aumentó las ventas de eléctricos en Francia, pero poco a poco esta diferencia se ha estabilizado. Ahora con el lanzamiento del BMW i3 y el pequeño VW E-up! se espera que las ventas en Alemania se disparen. También hay que decir que Alemania hubiera recuperado el liderato de ventas que había logrado hace dos meses, si no fuera porque el servicio de car sharing Autolib agregó 70 coches eléctricos a la flota en Francia.
Porsche señaló que, hasta el 14 de marzo de 2014, los visitantes podrán contemplar los diferentes modelos deportivos lanzados por la empresa desde 1948 y señaló que también se mostrarán algunos vehículos “que nunca antes se habían presentado al público”.
Otros automóviles que se exhibirán en el museo de Porsche en el marco de esta muestra serán el 959 S, desarrollado sobre el prototipo presentado en el Salón de Frankfurt de 1983, así como el 911 GT1, del que sólo se fabricaron 21 unidades, o el Carrera GT, que se mostró como ‘concept’ en el Salón de París de 2000.
No tiene los inconvenientes del eléctrico pero sí parte de sus ventajas, es el término medio total entre el coche convencional y el 100% eléctrico. Los fabricantes quieren sacar más modelos así, pero no ven que los consumidores estén muy por la labor. En plena crisis no sé qué esperan.